El sábado en Pekín tuve la suerte de tener el tercer encuentro mapamundiano del viaje. Es curioso como te puedes encontrar al otro lado del mundo con gente que tienes cerca todos los días y nunca hubieras llegado a conocer.
Joaquín (Funkyboy) y Juancho son gente estupenda con los que pasé un día formidable. Quedamos para comer un pato a la pekinesa (sin sopa) y arreglar el mundo.
Por la tade me acompañaron y guiaron de compras por Pekín para los pingos de recuerdo y similares. Teníais que ver a Funkyboy regateando. ¡Todo un espectáculo! A veces dudaba si la dependienta iba a terminar por pegarle o pedirle en matrimonio 😉 pero es que baja los precios hasta límites insospechados y además lo hace con gracia.
Luego me acompañaron a dejar los bultos al hotel y nos fuimos a buscar un restaurante con cerveza fría. “¡You!” Respondieron en el primero y nos sacaron tres pii jios fresquísimas. Aunque la pena fue que eran las únicas tres que tenían frías. Pero la comida muy buena. Lo que por cierto me confirmó que el mejor pollo con cacahuetes de Sichuan, también conocido como pollo gombao, se hace en Pekín.
En definitiva, buen rollo, buenas vibraciones y un buen día ideal para poner el broche a un buen viaje.
Y aquí la prueba. 😀