Categorías
Chile Chile en 2019

El viaje en el Crux Australis

Buenas,

tras El Viaje en el Yaghan, hace seis años, me quedé con ganas de navegar los fiordos chilenos más allá de los Andes y es lo que he podido hacer ahora.

Esta vez en el Crux Australis que hace la ruta entre Puerto Natales y Caleta Tortel al final de la Carretera Austral, que es mi siguiente destino.

Se trata de embarcaciones de transporte de vehículos y mercancías con salones adaptados para pasajeros en asientos reclinables. El viaje dura dos días.

Con el cielo plomizo, el mar es casi negro y las nubes y la bruma crean un paisaje impresionante.

De vez en cuando nos cruzamos con algún barco, pero no muchos.

La rutina consiste en salir a cubierta a ver el paisaje y tirar fotos mientras aguantas el frío y la lluvia. Si bien la temperatura no es muy baja, el viento encima de un barco lo cambia todo. En el Yaghan al menos no tenía lluvia, pero aquí sí, por lo que tampoco era cuestión de calarse. En una mano la cámara y en la otra un pañuelo para irla secando.
Luego vuelta al interior a recuperar el calor perdido.

Si no fuera por esas pequeñas notas de color parecería que estábamos en una película en blanco y negro.
 

A veces, por un momento salía el sol y lo cambiaba todo.

Llegamos a Puerto Edén, un pueblecito de unos 100 habitantes al que solo llegan estos barcos. Hecho de madera y con pasarelas de madera a modo de calles. Igual que Caleta Tortel, el destino de la navegación que es más famoso porque a ese sí se puede llegar por tierra por la Carretera Austral y tiene turismo.

Este barco no tuvo tanta suerte y terminó encallado ahí.

Cormoranes levantando el vuelo.

Y a las doce de la noche del segundo día llegamos a Caleta Tortel. Llegamos lloviendo a cántaros y así siguió el día siguiente por lo que apenas tengo alguna foto del pueblo más fotografiado de la carretera Austral. :ejem:

Saludos,
Colegota

Categorías
Laos en 2018

El Mekong marrón

Buenas,

os acordáis de los barquitos que salían en las fotos del Mekong…

Pues por dentro son así. smile3

He pasado dos días haciendo el recorrido en "slowboat"  entre Luang Prabang y Huay Xay, junto a la frontera con Tailandia. La mayoría de la gente viajera usa este trayecto en un sentido u otro para cambiar de país. Yo simplemente para disfrutar de los viajes en barco que me encantan, y para iniciar mi circuito en semi círculo por el norte de Laos.
Y por supuesto los locales porque las carreteras son mucho más lentas.

Se aprecia, como suele ser normal en estos viajes, la vida en el río y en la orilla.
 

Son dos viajes de unas nueve horas. El primer día haces noche en el pueblo-puerto de Pakbeng.

Aquí amaneciendo en Pakbeng mientras desayunaba.

El barco de hoy era algo más corto, pero tenía mesas como las de los trenes de antes y para mis piernas era peor.  diablo

Pero bueno, te levantas de vez en cuando con cualquier excusa, aunque tampoco mucho por que no quepo de pié  diablo y te vuelves a sentar a fundir el disparador de la máquina de fotos.  Sonrie, foto

Por cierto, ya os hablaré otro día de los plásticos en el río… o me lo recordáis.

Y aquí ya llegando a Huay Xay. Para no parar mucho porque mañana me subo a Luang NamTha en el norte y me gustaría llegar hasta Muang Sing que está cerca y allí ya parar unos días.

Saludos,
Colegota

Categorías
Argentina Brasil Chile Patagonia Patagonia en 2013

Por donde termina el mapa (de Sudamérica)

Buenas,
me voy a uno de esos «rincones» que llevan años en mi agenda. A comprobar esa sensación que dan los lugares en que no es lo mismo vivirlos a que te los cuenten. hemisferios-300Y para empezar, «ya que estoy por ahí», haré una visita relámpago a las cataratas de Iguazú donde creo que el baño de humedad y calor me aturdirá lo suficiente como para al día siguiente volar unos miles de kilómetros al sur hasta Ushuaia y Puerto Williams en la Tierra del Fuego.

Desde aquí tomaré un ferry por los canales australes hasta Punta Arenas adentrándome en la Patagonia Chilena y de ahí a Puerto Natales, base para realizar un circuito de senderismo de cinco días en el Parque Nacional de las Torres del Paine. A continuación a El Calafate a ver (y escuchar) el glaciar Perito Moreno. Y de nuevo a otra de las catedrales del senderismo, El Chaltén. Donde espero realizar varias excursiones y tal vez también alguna caminata en hielo por algún glaciar.

Finalmente subiré a Puerto Madryn, en Península Valdés por si me quedan de ver algunos pinguinos, lobos y elefantes de mar, pero sobre todo para admirar a la ballena franca austral. Y de ahí, tras una breve pausa en Buenos Aires, regresar a casa al cabo de un mes.

Bajo estas líneas se pueden ver en un mapa interactivo los lugares del recorrido. Creo que intentaré ir marcando por dónde voy y a dónde me dirijo.

[iframe width=»100%» height=»600px» frameBorder=»0″ src=»http://umap.openstreetmap.fr/es/map/patagonia-2013_1256?scaleControl=false&miniMap=true&scrollWheelZoom=false&zoomControl=true&allowEdit=false&moreControl=true&datalayersControl=false&onLoadPanel=none#4/-43.52/-62.84″]

Ver el mapa en pantalla completa

Para los que queráis estar informados, he habilitado una suscripción por correo en el lateral de la página.

Saludos,
Colegota

Categorías
Nepal Nepal en 2011

A Nepal para tocar el cielo con los pies

AnapurnaFromPokhara
Imagen de la Wikipedia. Pinchando se accede a una página con detalle de los picos y el lago.

 

Aunque esta página se llame La Tierra Vista Desde El Suelo, esta vez el suelo va a estar muy arriba. A 5416 metros si las cosas me salen bien.

El 10 de septiembre emprendo viaje a Nepal con idea de realizar la travesía por el Circuito del Annapurna como eje central. Le precederán recorridos por el Valle de Katmandú y el camino entre la capital y Pokhara antes de comenzar a caminar alrededor del macizo que contiene uno de los catorce «ochomiles» y varios sietemiles.

No suelo hacer «trekking» cuando voy de viaje, salvo tal vez algunos cortos. Cuando vi que en Nepal era difícil que bajasen de los 10-12 días pensé que no era para mi. Me gusta aprovechar los viajes para conocer gentes y culturas y parece que si andas por el monte te las vas a perder. Pero una vez que estaba más informado vi que este circuito era otra cosa. Consiste en ir de aldea en aldea por los caminos y senderos que las unen, comiendo y durmiendo en albergues conocidos como «Casas de té». Se parte de menos de 1000 m de altitud, en clima y vegetación tropical y enseguida estás a 3000 m. rodeando algunos de los picos más altos del Mundo como paisaje. El paso de Thorong La a 5416 metros, parece ser el más alto del Mundo haciendo senderismo. Y luego se baja a valles desiertos y pedregosos para finalizar. El recorrido típico dura 17 días que se pueden estirar o reducir a conveniencia en algunos puntos.

Los vuelos a Katmandú cuentan con pocas opciones económicas si intentas trayectos con la misma compañía. Además, retrasé mucho los preparativos y la decisión por lo que la premura tampoco ayudaba. No obstante conseguí al menos una muy buena combinación con Qatar con ida de 15h y vuelta de 13h por algo más de 1100 euros. Solo una escala breve en Doha.

La preparación de la travesía está suponiendo la mayor parte de los preparativos del viaje. Como siempre en Internet se puede encontrar mucha ayuda comenzando por este estupendo hilo con sus respuestas Consejos prácticos para realizar el trekking al circuito del Annapurna en ViajaBlog. También el foro internacional de Lonely Planet, donde también he puesto una serie de consultas amablemente respondidas.

Entre los enlaces obtenidos en el foro de LP destacan estos de Kathmanduo sobre trekking en Nepal y este otro del experimentado viajero Rob «Into Thin Air» con multitud de consejos y recomendaciones de todo tipo sobre viajar por Nepal.

También muy recomendable esta página con mapas y métodos para aprender el Nepalí (o Nepalés, según las traducciones).

Y por supuesto, no me puedo olvidar de mis amigos de Fotolibre, que me han ayudado en la preparación del equipaje para una travesía de dos semanas.

Puede que esta haya sido la tarea que más tiempo me ha consumido. He cambiado varias veces de opinión sobre contratar o no ayuda para llevar el equipaje. Primeramente me lo planteé para hacerlo por mi cuenta por lo que supone como reto. Realmente parece que los caminos no tienen pérdida y que se puede hacer sin guía. Me preocupaba al principio el peso. Compré una mochila de 38l de las especiales para gente alta y aunque me asusté un poco en las primeras rampas de prueba, poco a poco vi que sí que podía. El principal obstáculo consistía en el volumen. Reduciendo al mínimo todos los materiales llevaba la mochila a reventar. Temía que necesitara algo más a última hora. Y también se me complicaba un poco la logística, pues si dejaba el grueso del equipaje en Katmandú, tenía que regresar a por él al acabar el circuito en lugar de seguir en ruta.

Los porteadores no suelen hablar Inglés y los guías no llevan carga. Pero hay también porteadores/guías que están estudiando y todavía no tienen el título de guía, pero te hacen de tales. Al menos te pueden ir contando cosas y servir de intérpretes con los locales porque la idea de alguien con quien no entenderte 24h al día durante más de dos semanas no atrae para nada.

Otro aspecto a tener en cuenta es la climatología. Septiembre es el final del monzón y aunque la parte alta del circuito está en la zona de sombra de lluvia, se recomienda que cuanto más tarde comiences mejor. Por lo que dedicaré los primeros días a recorrer el Valle de Katmandú y cercanías, luego me voy al circuito hacia el 19 y tras parar algún día en Pokhara vuelvo a Katmandú para cerrar el viaje.

Y esto es lo que hay de momento. Dentro de poco, más y mejor. 🙂

Saludos,
Colegota

Categorías
Indonesia Indonesia en 2010

El camino a Kerinci y su regreso

Una de las cosas que estoy aprendiendo de Sumatra es que a los conductores de autobús no les gusta madrugar. Lo que dificulta bastante que se puedan aprovechar los días por estas carreteras lentas como pocas.

El bus para Kerinci sale de Bukittinggi a las 11. Aquí hay una terminal de autobuses, Aur Kuning, a pocos kilómetros del centro. La opción A es ir un día en un oplet o mini furgo convertida en bus improvisado, a Aur Kunning y comprar el billete. Luego ir con el equipaje de nuevo el día que sale el bus. La opción B es encargar la compra del billete al hotel. Te hacen la reserva y te llevan desde el hotel en coche con tu equipaje a la hora de salida. Pagas una comisión que podría ser más barata. Pero dado que el tiempo se suele agradecer cuando vas mirando el calendario y que no me gusta moverme mucho cuando voy cargado, suelo “picar”.

Afortunadamente había pedido salir una hora antes, en lugar de media, porque lo primero que nos encontramos fue una especie de desfile de carnaval que había cortado el tráfico y al dar la vuelta para tomar otro camino resultó que el resto del mundo había hecho lo mismo. Después tuvimos que parar en una gasolinera porque iba a subir el precio y el día anterior no habían conseguido llenar el depósito que estaba en las últimas. Finalmente llegamos, localizamos el bus y me subí.

Éramos tres pasajeros. Uno de ellos un chaval de unos 12 años que iba a Sungai Penuh, el final del viaje 50 km más que yo, al que su madre me dijo algo así como que le cuidase. Pero el chaval no sabía nada de Inglés, así que poca conversación hubo. Aunque de vez en cuando cruzábamos frases y alguna sonrisa.

Como suele pasar en estos lares, a las 12 llegó un cuarto pasajero y salimos. El bus en realidad es una furgoneta grande o micro-bus. Con 11 o 13 plazas según la disposición. Suelen tener un mínimo de espacio para mis piernas, aunque a veces se meten cuatro personas en tres asientos o bastante más si son trayectos cortos.

Las carreteras son lentas y en estos tramos con muchas curvas. Además de muy estrechas, por lo que cuesta adelantar y hay todo tipo de vehículos. Incluyendo por la parte de Kerinci unos carros tirados por un buey. También hay que añadir que los agricultores ponen a secar las semillas, granos de café o tiras de canela en el mismo asfalto ya que no hay cuneta y esto deja el ancho disponible en lo justo para un vehículo en muchos tramos. Son algo más de 200 Km que llevaron un total de 9 horas.

Claro que a esto hay que añadir las paradas. La primera, por supuesto para comer.

El conductor, que ya me había preguntado a qué homestay (casa de huéspedes) iba en Kersik Tua, y que se lo iba diciendo a todo el mundo, al ver que hablaba Indonesio para pedir la comida se vino arriba y comenzó la típica ristra de preguntas para deleite del resto de comensales y personal del restaurante, algunos de los cuales se sumaron al interrogatorio.

En un pueblo donde se unen las carreteras que vienen de Bukittinggi o Padang, aparcó el bus y desapareció durante un buen rato. Por la tarde llegamos a la que debía ser su tierra porque no paraba de encontrarse amigos. Y cada vez que veía uno paraba el bus en la cuneta y se bajaba a hablar con él. Más tarde,parece que la gente que había en una tienda a unos metros de la carretera debía ser su familia y también pasó un agradable rato con ellos mientras nosotros veíamos desde el bus como jugaba con un bebé que daba sus primeros pasos. Pero esto parece ser habitual, así que nadie se extrañó ni molestó y yo no iba a ser menos. Ah, la almohada que se ve en la foto del interior tambien la bajo a comprar por el camino. Cheesy

Lo que remató fue que a falta de una hora para llegar a Kersik Tua paró a cenar. Con las ganas que tenía yo de terminar la jornada. Finalmente a las 9 de la noche llegamos. Los homestay tienen carteles muy pequeñitos sin iluminar y no había casi nadie por las casas a oscuras y no lo encontrábamos. Tras ir carretera arriba y abajo varias veces encontramos a unos tertulianos, uno de los cuales subió con nosotros al bus y nos llevó. La casa de Pak Subandi, el que sería mi anfitrión y guía está 50 metros al sur de la entrada al Parque Nacional marcada con la estatua de un tigre, de Sumatra, claro.

El regreso no dejó de tener menos alicientes, aunque tal vez no tantos. Se trataba no solo de volver a Bukittinggi, sino de continuar viaje hacia el lago Toba. Uno de los más largos que se puede hacer por aquí sin competir con el avión. Para Prapat, en el lago Toba, hay que coger el bus en Padang que luego pasa por Bukittinggi. El primer bus para Padang me dijo Pak Subandi que salía de Sungai Penuh a las 8, pasando por Kersik Tua a las 9 y tardando unas 7 horas más en llegar a Padang. Lo que me daba pocas opciones para llegar a tiempo de coger allí el bus para Prapat. Pero a Bukittinggi sólo hay uno por la tarde, así que ese imposible.

Como es de esperar, el bus de las 9 llegó a las 10. Éste iba lleno y me tocó ir un tramo compartiendo tres asientos con otros tres pasajeros. Afortunadamente, dos chavales jóvenes que ocupaban poco y otro que se bajó en menos de dos horas. Así que el resto del viaje fue bastante confortable. Con la sola parada a comer, que aquí se hace sobre las 12.

Cerca de Padang comenzó a llover. Estoy teniendo más o menos suerte con la lluvia porque me ha tocado varias veces, pero no he llegado a mojarme apenas. A eso de las 3 y media, comenzó el reparto de pasajeros por las calles de las afueras de Padang y sobre las 4 el conductor me dejaba en la oficina de la compañía de autobuses. La guía de Lonely Planet no ayuda mucho en esto porque dice que como ya no se usa la antigua estación, que los buses pueden recogerte en el hotel. Pero claro, si no estás en un hotel, a saber. Bueno, la opción era la que había escogido el conductor de llevarme a la oficina. Pero desgraciadamente, el único bus diario había salido a las 2 y no había hasta el día siguiente. Por lo que la oficinista, muy amable, me sugirió que me dirigiera a Bukittinggi, cosa que ya tenía en mente, pues Padang es una ciudad grande en la que a esas horas me tenía que meter en el hotel a esperar el bus el día siguiente, mientras que en Bukittinggi el centro es pequeñito y te puedes mover andando. Además, un terremoto sacudió Padang en Octubre pasado y no tengo referencias de qué hoteles siguen funcionando y cuáles no. Ni de cómo está la ciudad.

La chica de la oficina salió conmigo a la calle para ayudarme a buscar un taxi a Minang Plaza que es desde donde salen los transportes a Bukittinggi, aunque ya me advirtió que no habría bus público por lo que tendría que coger “travel”. Es decir, un poco más caro.

De camino el taxista me ofreció llevarme él a Bukittinggi por 200 K. Había pagado 225 desde el aeropuerto que es algo menos de distancia. Pensando un poco entre lo que me iba a cobrar la carrera a Minang Plaza más lo que me cobrase el travel, la diferencia no era tanta. Y si en taxi son dos horas y media, de otra forma hubiera llegado a partir de las nueve. Y aquí anochece a las seis y media y se cena poco después. Además, moverme con todo el equipaje lloviendo no me motivaba mucho. Regateé un poco y lo dejamos en 175.

Finalmente, de vuelta en el Hotel Orchid, me dijeron que el bus desde aquí sale a las 6. Teniendo en cuenta que llegué algo más de las 7, se me escapó por poco, aunque según el retraso es posible que se pudiera haber llegado.

Hoy de nuevo he reservado con el hotel. Me cobran 180 incluyendo el llevarme a la oficina de la compañía que está en las afueras, aunque creo que también para en Aur Kunning, sobre los 135 que cuesta el billete. Pero es que además de todo llevo unas agujetas del Kerinci que apenas puedo andar, así que dejaremos el ahorro para más tarde.

El viaje a Prapat es uno de los que más aventuras se cuentan. Viene a durar un mínimo de 15 horas y un máximo de no se sabe, pero que puede llegar al doble. Así que ya os contaré, pero no se cuando. Smiley

Saludos,
Colegota

Categorías
Indonesia Indonesia en 2010

Hasta Bukittinggi o más allá

Para una vez que consigo buen asiento en el vuelo largo, el problema han sido las esperas en los aeropuertos. Los grandes vuelos están pensados para que trastoquen lo menos posible el ritmo de sueño, pero eso es si comienzas el trayecto donde comienza el vuelo largo. Saliendo a las 14 de Roma, habiendo dormido y descansado antes está bien. Pero el problema es que el vuelo de Barajas salía a las 6 de la mañana. Espérate desde las 9 hasta entonces sin dormir, y ya comienzas arrastras.

Del aeropuerto de Roma, dos apuntes rápidos. Que ya tengo el lápiz para limpiar las lentes como el de Medyr, lo que me hace temer que me empiecen a salir las fotos desenfocadas y tenga que comprarme objetivos nuevos. Y esta foto a la que no pude resistirme. 🙂

Camera
DMC-FS6
Focal Length
5.5mm
Aperture
f/2.8
Exposure
1/30s
ISO
100

De ahí a Kuala Lumpur bien. Al poco de despegar nos dieron de comer y por fin pude dormir un poco. Luego la merienda. Y cuando me estaba durmiendo otra vez… ¡la cena! Justo un poco antes de llegar, por lo que ya no concilié el sueño.

La espera en Kuala Lumpur fue breve. Pero no así en Medán. Llegaba antes de las nueve de la mañana.Hay dos garitos para cambiar dinero a la salida de internacional, y justo fuera,, un cajero. El cambio a la izquierda era muy malo, pero el de la derecha era un 1,5% que es bastante decente. Los bancos españoles cobran en general un 4% por sacar en el extranjero con tarjeta de débito y 5% de crédito. ING es un 1% más 2 euros, por lo que sales comido por servido ya que en Indonesia no puedes sacar grandes cantidades de una vez debido al elevado número de billetes. Unos 150 euros máximo. Por lo que este año voy a procurar cambiar en lugar de sacar todo de cajeros.

El problema es que en Asia no puedes facturar hasta 2 horas antes de salir el vuelo y a mi me faltaban más de seis. Y en la terminal no hay asientos hasta que no entras a la sala de espera… a todo esto le añades un sueño que me quedaba dormido de pié y se te hace eterno.

Estuve un par de horas sentado en una cafetería donde desayuné. Pero las sillas eran tan incómodas que me levanté para poder descansar y estirar las piernas (si cabe). Cuando estaba a punto de embarcar me fijé en unos pequeños carteles que decían que era zona wifi. Sad Podía haber estado conectado en la cafetería, pero ya no me merecía la pena. Para colmo, en la sala de espera me encuentro esto.

Casi a las 4 de la tarde salimos para Padang donde cogí un taxi a Bukittinggi. Hay un mostrador donde los taxistas esperan turno, pagan y se te llevan. Tienen los precios escritos para cada destino. Bukittinggi son 222.000 rupias. Está bien si lo puedes compartir pero unos con los que había coincidido en Medan no debieron conseguir vuelo y era el único blanquito a bordo. Se puede ir en bus, pero las 5 en Indonesia es casi de noche y bajan los servicios.

El trayecto fueron dos horas que se hicieron amenas porque el taxista me preguntó que si sabía Indonesio y yo le dije que solo un poco. A continuación me preguntó algo sobre Bukittinggi que no entendí y le repetí la primera palabra. Lo que para él debió suponer la respuesta porque movió la cabeza afirmativamente con energía mientras sonreía y el hombre se vino arriba y ya me fue dando conversación el resto del viaje. Afortunadamente, eran frases más o menos sencillas y tirando de diccionario, en dos horas estábamos en Bukittinggi. Y ya se me habían pasado todos los males. Y los que no, se me pasaron cuando me acordé de lo bien que se come aquí. Smiley

Respecto al hotel, estoy en el Orchid. No les quedaban habitaciones con agua caliente, pero ese día me conformaba con una cama. Y al siguiente me pasé a una con agua caliente, ya que al ser fin de semana estaban llenos. Hay bastante turismo local por aquí. Es de los de “básico pero limpio” que se ve que ha conocido mejores tiempos, pero puede valer. 75 K con agua fría, 100 K caliente y 150 K otra que no se qué tendrá. Tienen muy preparado el tema del turismo con excursiones típicas a los sitios habituales. Al igual que el Canyon Café enfrente. Y lo primero que te preguntan es si quieres ir a las Mentawai, cosa que ya parece haberse convertido en “trampa para turistas” y que además dura varios días. Son tribus que viven en la isla de Siberut, en la selva y que parece que el turismo más burdo ha destrozado. Pero de excursiones, mejor hablamos en otros reportajes.

Saludos,
Colegota

Categorías
Myanmar Myanmar en 2006 Rincones favoritos

El Ayeyarwady azul

Buenas,

ya sabéis que lo mío son los colores. 🙂 Y que me encantan los viajes en barco por los grandes ríos. Éstos como sabéis tienden a ser marrones. Pero los enamorados, turistas, viajeros y fotógrafos aficionados tendemos a verlos azules. ¿De qué color lo véis vosotros?


 







Saludos,
Colegota